


Tradición, celebración y excelencia servidas en bandeja.
En Fuego y Sabor, honramos los grandes momentos con platos que están a la altura. Nuestra propuesta de lechón y cochinillo es un homenaje a las reuniones familiares, a las fiestas de fin de año y a todo evento donde la comida debe ser protagonista. Cocidos lentamente, sazonados con especias suaves y terminados al horno hasta lograr una piel dorada y crocante, estas piezas son sinónimo de celebración.
El lechón es ideal para compartir en grupos grandes. Tierno, jugoso y rendidor, se presenta entero o trozado, listo para servir, y acompañado —si se desea— por salsas caseras, panes artesanales y guarniciones que realzan su sabor.
El cochinillo, más pequeño y delicado, es perfecto para celebraciones íntimas o para quienes buscan una experiencia gastronómica distinta, con una cocción precisa y una textura suave inigualable.
Cada pieza es seleccionada por su calidad y tamaño, y preparada con técnicas que aseguran no solo el sabor, sino también la presentación. No hay improvisación: hay oficio, hay detalle y hay fuego.
Tanto el lechón como el cochinillo pueden entregarse fríos o calientes, enteros o trozados, y siempre con la garantía de un servicio profesional que respeta tus tiempos y tu mesa.

